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- Nada, no contestan.
- Inténtalo de nuevo
- Ya estoy cansado de hacerlo, ya habré mandado como cuarenta señales y no les da la gana contestar.
- Pues no podemos tirar la toalla.
- Ya lo sé, pero es que uno se cansa de hacer el primo.
- Manda güevos. Todos los años por estas fechas el mismo rollo
- Espera, que me acaba de subir otra queja... Mira, la remite el hígado... A ver, leo... Dice que hará como seis días que no recibe ni gota de agua, que sólo hace que filtrar cerveza, vino, sidra y champán... que tiene las células totalmente pedo.
- ¿Y qué pretende que hagamos? Dale entrada a la queja del hígado también, que ya las recibirán en la nave nodriza todas de golpe.
- Pues se van a cagar en algo malo cuando se den cuenta del trabajo que les viene encima: hay un atasco de colesterol en más de cuatro avenidas, el ácido úrico se está meando por todas las esquinas y en el vientre tienen una buena remesa de turrón de Jijona y polvorones.
- Pues que construyan michelines.
- Ya, si eso hacen, pero piden más agua para amasar el revoltijo.
- No, diles que agua no entra, que se apañen con otra cosa.
- Les diré que vayan dando forma a los ladrillos con los bigotes de las gambas. El tipo este se las ha tragado todas.
- Mira, ahora me llega una señal de los músculos de las piernas.
- Lo que me faltaba, otra queja, ¿no?¿Qué dicen?
- Que se habían acostumbrado a la rutina del footing matinal y que ahora lo echan en falta. Que si va a haber algo de actividad, que menudo muermo...
- Mira, ni te molestes en contestar.
- Hombre, qué menos que una llamada perdida, que vean que nos solidarizamos...
- Inténtalo de nuevo
- Ya estoy cansado de hacerlo, ya habré mandado como cuarenta señales y no les da la gana contestar.
- Pues no podemos tirar la toalla.
- Ya lo sé, pero es que uno se cansa de hacer el primo.
- Manda güevos. Todos los años por estas fechas el mismo rollo
- Espera, que me acaba de subir otra queja... Mira, la remite el hígado... A ver, leo... Dice que hará como seis días que no recibe ni gota de agua, que sólo hace que filtrar cerveza, vino, sidra y champán... que tiene las células totalmente pedo.
- ¿Y qué pretende que hagamos? Dale entrada a la queja del hígado también, que ya las recibirán en la nave nodriza todas de golpe.
- Pues se van a cagar en algo malo cuando se den cuenta del trabajo que les viene encima: hay un atasco de colesterol en más de cuatro avenidas, el ácido úrico se está meando por todas las esquinas y en el vientre tienen una buena remesa de turrón de Jijona y polvorones.
- Pues que construyan michelines.
- Ya, si eso hacen, pero piden más agua para amasar el revoltijo.
- No, diles que agua no entra, que se apañen con otra cosa.
- Les diré que vayan dando forma a los ladrillos con los bigotes de las gambas. El tipo este se las ha tragado todas.
- Mira, ahora me llega una señal de los músculos de las piernas.
- Lo que me faltaba, otra queja, ¿no?¿Qué dicen?
- Que se habían acostumbrado a la rutina del footing matinal y que ahora lo echan en falta. Que si va a haber algo de actividad, que menudo muermo...
- Mira, ni te molestes en contestar.
- Hombre, qué menos que una llamada perdida, que vean que nos solidarizamos...
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- ESPERA, parece que por fin recibo señal de la computadora central... ¿Si? ¿Me escucháis?
- Hola
- ¿Hola? ¡ Maldita sea!, ¿se puede saber qué hacéis? Llevamos la tira de días en la más pura anarquía. ¿No os vais a dignar a dar órdenes?
- No, yo no...
- Pero ¿quién es? ¿Estoy hablando con Gran Cerebro?
- Sí, bueno, pero yo soy la chica de la limpieza... Es que he venido a poner un poco de orden aquí y como sonaba tanto el teléfono, pues al final lo he cogido... No sé si he hecho bien...
- Mecaguenlaputa!! ¿Y no hay nadie ahí que pueda atendernos?
- Pues va a ser que no. Aquí están todos durmiendo la mona
- Pero no puede ser, ¿y quien maneja este cuerpo?
- Es que me parece a mí que han puesto el piloto automático para poder montarse la juerga padre. Aquí no se menea naide.
- ¡La madre que los parió! ¿Y no tiene usted nociones para activar alguna palanca?
- ¿Yoo? Dios me libre. Si no me pagan bastante para las panzás de trabajo que me arreo. Si hasta he recogido unas bragas de la trastienda…
- ¿Bragas? (mira a su compañero) ¿Tú sabes algo?
- Será cosa de los chicos del subconsciente. Ya sabes cómo son…
- Ya. Señora, ¿me escucha?
- Le escucho.
- Háganos un favor. Hay una cosa importantísima que llevar a cabo.
- ¿Qué tengo que hacer?
- Levante la tapadera gris de la derecha y apriete el botón con una D mayúscula
- ¿Una B?
- ¡Una D! De Despertar
- Pero aquí hay mucha tapadera gris
- Levante una a ver
- ¿Estas seguro de lo que haces? Es la señora de la limpieza…
- A grandes males, grandes remedios. Hay que intentarlo.
- No veo ninguna D, señor. Aquí veo una V.
- No, no, esa es para vomitar. Un poco más a la izquierda.
- Ay, señor, que me ha dado un calambre. Yo no me atrevo a toquetear todo esto.
- Je, un calambre. Verás la jaqueca con la que se van a levantar estos. Haga otro intento por favor.
- Aquí hay un botón con una E
- Tampoco, no necesitamos una erección ahora.
- Una D, una D. ¡¡La he encontrado!!
- Perfecto, señora. ¡Púlsela!
- Voy… ¡Ya está!
- Bien. Muchas gracias. No sabe cuánto se lo agradecemos. Ahora despertará este cuerpo y se movilizarán forzosamente todos los obreros. Ya era hora.
- Mira, llega un teletipo urgente.
- ¿Qué dice?
- Son los intestinos, dicen que no comprenden por qué les enviamos esos latigazos, que los nutrientes son aceptables…
- ¿Latigazos? ¿Qué los nutrie… ¡Señora!
- Dígame
- ¿Ha apretado una D mayúscula?
- Ay, no, es minúscula
- Mierda. Le ha dado al botón de diarrea.
- Tú lo has dicho: Mierda.
- Mira, no hay mal que por bien no venga. Prepárate porque aquí se van a despertar todos en un santiamén.
- Agárrate fuerte. Se han abierto los ojos de golpe.
- ESPERA, parece que por fin recibo señal de la computadora central... ¿Si? ¿Me escucháis?
- Hola
- ¿Hola? ¡ Maldita sea!, ¿se puede saber qué hacéis? Llevamos la tira de días en la más pura anarquía. ¿No os vais a dignar a dar órdenes?
- No, yo no...
- Pero ¿quién es? ¿Estoy hablando con Gran Cerebro?
- Sí, bueno, pero yo soy la chica de la limpieza... Es que he venido a poner un poco de orden aquí y como sonaba tanto el teléfono, pues al final lo he cogido... No sé si he hecho bien...
- Mecaguenlaputa!! ¿Y no hay nadie ahí que pueda atendernos?
- Pues va a ser que no. Aquí están todos durmiendo la mona
- Pero no puede ser, ¿y quien maneja este cuerpo?
- Es que me parece a mí que han puesto el piloto automático para poder montarse la juerga padre. Aquí no se menea naide.
- ¡La madre que los parió! ¿Y no tiene usted nociones para activar alguna palanca?
- ¿Yoo? Dios me libre. Si no me pagan bastante para las panzás de trabajo que me arreo. Si hasta he recogido unas bragas de la trastienda…
- ¿Bragas? (mira a su compañero) ¿Tú sabes algo?
- Será cosa de los chicos del subconsciente. Ya sabes cómo son…
- Ya. Señora, ¿me escucha?
- Le escucho.
- Háganos un favor. Hay una cosa importantísima que llevar a cabo.
- ¿Qué tengo que hacer?
- Levante la tapadera gris de la derecha y apriete el botón con una D mayúscula
- ¿Una B?
- ¡Una D! De Despertar
- Pero aquí hay mucha tapadera gris
- Levante una a ver
- ¿Estas seguro de lo que haces? Es la señora de la limpieza…
- A grandes males, grandes remedios. Hay que intentarlo.
- No veo ninguna D, señor. Aquí veo una V.
- No, no, esa es para vomitar. Un poco más a la izquierda.
- Ay, señor, que me ha dado un calambre. Yo no me atrevo a toquetear todo esto.
- Je, un calambre. Verás la jaqueca con la que se van a levantar estos. Haga otro intento por favor.
- Aquí hay un botón con una E
- Tampoco, no necesitamos una erección ahora.
- Una D, una D. ¡¡La he encontrado!!
- Perfecto, señora. ¡Púlsela!
- Voy… ¡Ya está!
- Bien. Muchas gracias. No sabe cuánto se lo agradecemos. Ahora despertará este cuerpo y se movilizarán forzosamente todos los obreros. Ya era hora.
- Mira, llega un teletipo urgente.
- ¿Qué dice?
- Son los intestinos, dicen que no comprenden por qué les enviamos esos latigazos, que los nutrientes son aceptables…
- ¿Latigazos? ¿Qué los nutrie… ¡Señora!
- Dígame
- ¿Ha apretado una D mayúscula?
- Ay, no, es minúscula
- Mierda. Le ha dado al botón de diarrea.
- Tú lo has dicho: Mierda.
- Mira, no hay mal que por bien no venga. Prepárate porque aquí se van a despertar todos en un santiamén.
- Agárrate fuerte. Se han abierto los ojos de golpe.