Me ha faltado la punta-un-cuerno para montar en cólera.
Necesitaba imperiosamente el Demonicus Catalogus para escribir esta entrada y no lo encontraba por ningún sitio. No por mi culpa, sino porque un libro del color de las brasas candentes no es especialmente distinguible aquí abajo.
Pero ya se halla en mi poder.
Con esta fabulosa colección de demonios a mano, puedo al fin demostraros que todos tenéis vuestro particular “alter ego de las sombras”, vuestro sosias perverso e inmoral.
Necesitaba imperiosamente el Demonicus Catalogus para escribir esta entrada y no lo encontraba por ningún sitio. No por mi culpa, sino porque un libro del color de las brasas candentes no es especialmente distinguible aquí abajo.
Pero ya se halla en mi poder.
Con esta fabulosa colección de demonios a mano, puedo al fin demostraros que todos tenéis vuestro particular “alter ego de las sombras”, vuestro sosias perverso e inmoral.
A aquellos que asomásteis por aquí la semana pasada, os presento, en orden alfabético, vuestros demonios personales. Ya sabrá cada cual unirse al suyo.
ARAS DE ABODROC.- Oriundo del califato andalusí, este demonio carmesí se caracteriza por su buen olfato, y por sus aullidos prolongados cada vez que tiene frío (o cada vez que tiene flato)
Inofensivo durante el día, más antipático en el transcurso de la tarde y un auténtico energúmeno cuando llega el viernes noche, Aras de Abodroc se acicala con jazmines y fango de las esclusas para salir de entre muros y hacer el mal a troche y moche.
Se le invoca colocando en el alfeizar de cualquier ventana morisca una bandeja de queso curado.
Se le invoca colocando en el alfeizar de cualquier ventana morisca una bandeja de queso curado.
Se le espanta al grito de "¡Que viene Don Pelayo!"
ATIXNOC DE ANOLECRAB.- Pertenece al grupo de los aerófugos, es decir los demonios que huyen volando.
Su figura se gesta en el delta del Ebro en años impares y, al no ser nada corriente, nada a contracorriente por el río, visitando masías catalanas a deshoras.
A Atixnoc le da igual presentarse sin que se le llame, pero lo más habitual es que no haya nadie cuando aparece porque al tener el vello fluorescente se le presiente enseguida.
Pasa largas temporadas aletargado en la conciencia (dins del cap)
A Atixnoc le da igual presentarse sin que se le llame, pero lo más habitual es que no haya nadie cuando aparece porque al tener el vello fluorescente se le presiente enseguida.
Pasa largas temporadas aletargado en la conciencia (dins del cap)
ESTNOM DE ANOLECRAB.- Tiene más de duende maligno que de demonio propiamente bicho, (sí, he dicho bicho) En las esferas del bajofondismo es conocido como Estnom, el Rastrillo, aunque en las enciclopedias demoníacas siempre es La Bot Anica.
Habita en las rosaledas de la Costa Brava, donde es fácil encontrarlo regando gladiolos mientras sacude pulgones con el rabo. Se camufla entre la hojarasca cuando es descubierto, pero lo hace sin prisa alguna, seleccionando las hojas más grandes antes de echarse al suelo y comenzar a cubrirse.
Habita en las rosaledas de la Costa Brava, donde es fácil encontrarlo regando gladiolos mientras sacude pulgones con el rabo. Se camufla entre la hojarasca cuando es descubierto, pero lo hace sin prisa alguna, seleccionando las hojas más grandes antes de echarse al suelo y comenzar a cubrirse.
LE SALLOPILIG OCILOBAID.- Hay diablos malvados, diablos pérfidos y diablos sádicos. Y luego está Le Sallopilig.
En una escala de prioridades a la hora de salir echando leches, téngase por prioridad absoluta la de huir de este demonio en cuanto aparece.
En una escala de prioridades a la hora de salir echando leches, téngase por prioridad absoluta la de huir de este demonio en cuanto aparece.
Es tan malo que ni siquiera te concede el beneficio de la duda. Ni pregunta. Ni se lo piensa. Te señala sin inmutarse y ya no escapas de la condena de las cadenas.
Eso sí, a la hora de infligir sus castigos es bastante benévolo. Te permite elegir entre arrastrar cadenas, tirar de la cadena o cambiar de cadena (pero siempre hay futbol)
Eso sí, a la hora de infligir sus castigos es bastante benévolo. Te permite elegir entre arrastrar cadenas, tirar de la cadena o cambiar de cadena (pero siempre hay futbol)
LEUQAR DE AL ANUGAL.- "De los males de la tierra y todas las sales del mar, surge una sombra en tinieblas que es Leuqar de Al Anugal"
Así reza una antigua leyenda en el interior del volcán Ediet. Tan antiguo es el texto que fue escrito antes de que se formara el mismo volcán.
Leuqar produce confusión porque se refleja en sí mismo hasta convertirse en un duplicado de su propio ser. Es decir, que si lo ves, lo ves y lo ves. Pero no se han de contar esos Ves como Tres, que solo son dos en realidad.
Así reza una antigua leyenda en el interior del volcán Ediet. Tan antiguo es el texto que fue escrito antes de que se formara el mismo volcán.
Leuqar produce confusión porque se refleja en sí mismo hasta convertirse en un duplicado de su propio ser. Es decir, que si lo ves, lo ves y lo ves. Pero no se han de contar esos Ves como Tres, que solo son dos en realidad.
Sí, es este un demonio que confunde tanto que ni al escribir sobre él peudes hacelro bienas ta el filán.
NEKYELUS DE RETROPER.- Si la prensa es el cuarto poder y la fotografía el octavo arte, Nekyelus de Retroper es la sexta bestia. Una bestia culta, dicho sea de paso a nivel.
Su imagen es muy incómoda a los ojos (ya sólo su sombra es extremedamente antiestética) pero si Nekyelus te cuenta una historia caes postrado a sus patas y babeas absorto, seducido y fascinado.
Dicen que es el sonido de sus kas y sus emes, tan nasales y oclusivas, lo que tanto cautiva a los oídos más incautos. Y sin querer mirarlo, todos lo ad miran.
Dicen que es el sonido de sus kas y sus emes, tan nasales y oclusivas, lo que tanto cautiva a los oídos más incautos. Y sin querer mirarlo, todos lo ad miran.
NOMAR DE A AÑUROC.- "Estoy oyendo imágenes, estoy viendo canciones que ningún poeta ha dibujado antes"
Esta es la oración con la que se presenta Nomar de A Añuroc cada vez que tropiezas con él en el faro del Fin del Mundo.
Esta es la oración con la que se presenta Nomar de A Añuroc cada vez que tropiezas con él en el faro del Fin del Mundo.
Y de sus cartílagos auditivos mana una música atemporal que huele a ajo y habas. Es algo muy de ver.
Nomar pertenece al grupo de los Nomarees y todas sus crónicas, tanto las dantescas como las galegas se recojen en los llamados diabloletines.
OHCAN DE DIRDAM.- "Satán de los medicamentos" y "Cabra de los mataderos" Estos son dos de los muchos sobrenombres de Ohcan de Dirdam, el demonio que soporta las temperaturas más extremas y duras (incluidas las cacereñas)
Hay mucha controversia entre los luciferiantes, que defienden la bondad y virtudes de este demonio, y los lucifértiles que dicen que de bueno no tiene un pelo.
Hay mucha controversia entre los luciferiantes, que defienden la bondad y virtudes de este demonio, y los lucifértiles que dicen que de bueno no tiene un pelo.
Se le puede invocar en cualquier botica viejuna formando una O de aspirinas en el suelo.
OJERGNACAPAP DE NOLLETSAC.- Tan impronunciable es su nombre, tan complicado de reproducir, que él mismo prefiere llamarse Leafar y ahorrarse asfixias.
Demonio de piel tatuada y caparazón acrustaceado, este húmedo ser vive en las rocas que golpea el mar, por lo que su forma de tentar a los bañistas es convertido en brillante cangrejo-apto-para-sopa-de-marisco.
De cómo pasa de la cazuela a las almas de los cándidos mortales es algo que nadie logra saber, tal vez por lo bien que sabe.
SELEGNA DE AGALAM.- Dormitando siempre entre libros incunables, Selegna de Agalam, viaja de biblioteca en biblioteca como un diablo de fábula que no viene a cuento.
Se trata de un ser coordinado y yuxtapuesto al que se puede descubrir cuando miras bien entre lineas.
Con su piel manchada de tinta y una pinta que hiela la hiel, se halla entre pilas de libros, y en folletos en inglés.
Selegna no anda con preámbulos, su mirada (¡vaya impresión!) forma un nudo en tu garganta, y el desenlace se convierte siempre en una odisea.
Selegna no anda con preámbulos, su mirada (¡vaya impresión!) forma un nudo en tu garganta, y el desenlace se convierte siempre en una odisea.
Al margen de todo esto, es un ser ejemplar.
Bien, ya conocéis algo más de los demonios que os habitan. Estoy seguro de que a partir de ahora existirá un antes y un después en vuestras vidas. Esas vidas que, por otro lado, ya sabéis que me pertenecen.
No os resistáis más, pues.
No os resistáis más, pues.